sábado, 30 de enero de 2010

El olvido y el perdón



 
No resulta fácil perdonar los agravios. Nos sentimos dolidos con o sin motivo, por aquello que consideramos ofensa, menosprecio, agravio, o humillación, dirigidos hacia nosotros  por parte de una o varias personas.
En el ofendido, desde el punto de vista de su subjetividad, hay varios factores a considerar. En primer lugar y de manera global  la personalidad,  después la relación, la intencionalidad, y añadido a todo, las circunstancias varias.
Según somos, lo tomamos, según el aprecio que le tengamos al ofensor, nos afecta en una u otra dirección.
En algunas ocasiones, depende más del agraviado y la susceptibilidad del mismo, que de la intención del ofensor y el grado del menosprecio.
Quizá no hubo intención o mala fe, o no hubo nada de nada, pero ha favorecido y propiciado el victimismo del receptor, dándole una justificación para meterse en una situación que estaba buscando, y dar así rienda suelta, a unos sentimientos de rechazo.
 Por el contrario, puede pasar, que si hubiere intención de zaherir, y la persona a la que iba dirigida, no sentirse herida por diferentes motivos.
 Puede considerar que el aprecio está por encima,  y disculpa la falta hacia ella, o  puede  tener confianza en si misma y  hace prevalecer sus opiniones sobre las ajenas.
Desde mi punto de vista, no es lo mismo olvido que perdón. Para perdonar,  hay que recordar la ofensa. Creo que el auténtico perdón es ese, recordar,  pero sin tener en cuenta la humillación.
Si la olvidamos,  no perdonamos, y el sentimiento queda oculto,  pero actuando,  produciendo rechazo, odio, miedo, antipatía.
El que olvida no quiere perdonar, solo quiere tener presente esa animosidad, aunque no recuerde el motivo.
El que perdona, tiene presente la ofensa, la recuerda, pero no guarda ningún tipo de resentimiento ni animadversión. Simplemente ha perdonado, sin aversión, sin odio, sin enemistad, aunque recuerde.
El afecto sigue, si lo había antes, o  la indiferencia.



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viernes, 29 de enero de 2010

Una quimera



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                                  Pródigo eres con quien no te desea,
                               entregas la miel a quien no la merece
                               no ofreces bebida al sediento y perece,
                               buscando ese sentir que dicen escasea.

                               El cielo me ha negado la dicha de vivir,
                               negra noche sin luz, universo vacío,
                               al estremecer mi cuerpo el húmedo rocío
                               pienso...¿Por qué no puedo ni tan solo sufrir?

                              La sensación de sufrir puede ser placentera,           
                              con una doble mezcla de alegría y tristeza.
                              Se siente la fuerza a la vez la flaqueza,
                              perseguir sin poder alcanzar la quimera.

                              De mil quimeras se compone la vida,
                              quizá esa no exista mas yo la persigo.
                              Al desfallecer pregunto ¿si no lo consigo,
                              hallaré el remedio que cure las heridas?

                              No sé si busco la herida, o el dolor,
                              miro a mi alrededor desorientada.
                              De pronto, una luz atrae mi mirada.
                             ¡Lo veo!  ¡Eso es!  ¡Se trata del amor!
                              Y   rauda, hacia allí dirijo mis pisadas
               

jueves, 28 de enero de 2010

Adolescencia






                                     Adolescencia


Devuélveme a mi destino agreste, la lluvia de aquel viejo bosque, el aroma y las espadas que caían de mi cielo.
Laderas de pastos, montañas y piedra, la humedad, el viento latiendo como un corazón,  entre la muchedumbre  de la gran araucaria.
Quiero volver a ser lo que no he sido. La noche está cubierta de estrellas, muchas estrellas, gotitas de luz que salpican mi cielo.
Alguien se les ha muerto, se oyen los llantos por todas partes, mientras las estrellas,  pelean en un charquito de sueños.
Devuélveme mis días, mi aire, mi noche, mi todo.
Me pregunto ¿qué hago en estos lugares de destierro?.
Noche oscura  ¿Dónde estarán las lilas?  ¿Dónde estarán las flores?.
Fluyen ríos de sangre por las calles, como un manto de rojas amapolas.
Me pregunto  ¿qué hago en estos parajes de destierro?
¿Dónde estarán las estrellas luceritos de mi muerte?.
Aún huelo la madera fresca, la piedra de las calles de mi vida. Vivo los dolores, muero la alegría.
El mar eterno, las aguas de marzo, huelo el vapor, los latidos de la niebla, el frío, el hielo, aliento de la bestia.
Me pregunto ¿qué hago en estos parajes de destierro?
¿Dónde estarán los pájaros?   ¿Dónde estará mi cielo?
Volando desamparados con el silencio en sus alas.
Me pregunto ¿qué hago en estos parajes de destierro?
No veo mi noche  ¡Qué tierra tan sola!  ¡Qué noche tan triste!.



martes, 26 de enero de 2010

Hablar en silencio



   Te hablo sin voz, sin palabras.
un hablar que es puro sentimiento.
Pretendo que en silencio abras
tus brazos, tu alma, así lo siento
mientras con tu mirada labras
surcos en el aire, rasgas sin tiento.

Que el murmullo de la voz no sea sordo,
que tenga eco como mis sentimientos.


El silencio


A veces, la mejor manera de decir algo, es, callando.
Callar, es hablar sin hablar, sin sonido, sin ruido.  Hablar en silencio.
Las palabras sonoras, quizá tengan una mayor espontaneidad, hay que ir coordinando con el pensamiento.  No quiero decir que sean impremeditadas, o sinceras, pero al menos, se realiza una acción que necesita, tiempo.
El silencio, es el tiempo en si mismo.
Resulta más sonoro que las palabras y más significativo.  Se puede sentir el palpitar, captar los sentimientos, escuchar el pensamiento del silente,  por medio de una especie de telepatía que podríamos llamar, empatía.
Hay múltiples motivos para callar,  pero voy a hacer referencia solo, al "silencio emocional".  Ese que nos deja callados, enmudecidos, incapaces de expresarnos.  No queremos, no sabemos o no podemos.
Un grito ahogado, queda preso en nuestra garganta. Es un silencio audible,  la emoción se contagia, se vive, se escucha, se oye.
Esa riqueza de colores, es imposible  expresar con palabras.  No hay lengua, que tenga el vocabulario necesario,  para transmitir toda la variedad de tonos, matices, que encierran los sentimientos y las  emociones.
El gran silencio, o el pequeño, el corto o el largo, los intervalos entre palabras.  El ritmo del lenguaje.
Ganas de gritar enmudeciendo, de decir, de comunicar y no poder.

Los tiempos-ritmo-silencio....Música del alma.


Y nosotros.


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sábado, 23 de enero de 2010

Los sueños. Lo onírico

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Los sueños reales, esa serie de imágenes o episodios, que "vivimos", cuando dormimos.
Se escapan de nuestro control, pero dependen en gran medida, del estado de ánimo y la  tranquilidad de espíritu que tengamos en otros momentos, en ese periodo de tiempo que atravesamos cuando estamos despiertos.
Incertidumbres, miedos, cambios, inseguridades, conflictos, todo lo manifestamos en los sueños, durante los cuales revivimos todo aquello que queremos esconder  porque no nos es grato, y pretendemos ocultar a nuestra consciencia.  Por medio de imágenes, seres simbólicos, exteriorizamos de manera camuflada lo que llevamos oculto.
Cuando son bonitos, al despertar se produce la desilusión, el choque, el encuentro con la realidad. Queda el consuelo de haber pasado un rato agradable.  Es una pena que aunque volvamos a cerrar los ojos, no se repita.
Por el contrario, en las pesadillas, despertar es una liberación. ¡Tanto que nos quejamos de la vida, y que bonita nos parece en el momento que abrimos los ojos!
Nos levantamos, nos acercamos a la ventana, la abrimos dejamos que entre el sol, respiramos y la pesadilla se aleja.
Esa especie de habitáculo desconocido, que todos tenemos llamado subconsciente ¡la de cosas que guar

A veces, da la sensación de estar tan próximo que incluso se puede tocar, se nota el cosquilleo, como cuando entras a un lugar oscuro y vas a tientas. Pero se resiste, no acaba de dejarse conocer.
Creo,  que para algunas personas está más próximo que para otras, más en la superficie, que lo pueden percibir, notar, sentir,  pero al llamar a la puerta, no abre.
Pregunto...Si es nuestro, si somos nosotros ¿Por qué nos niega su entrada? ¿Por qué no está todo a la vista?
¿O es que la memoria de los hombres es tan limitada, que hubo cosas que las integró, pero no las recordó?. No encuentro explicación a la razón de ser, a su existencia. Lo mismo que en nuestra evolución, llegamos a ser como somos, lo mismo, podrían quedar todas nuestras experiencias en la memoria, u olvidarlas del todo. Pero conocer sin conocer, dirigirnos,  influirnos o marcarnos....¿Por qué?

Difícil es interpretar un sueño  ¡Qué camuflado y enredado está todo!   En contadas ocasiones, he conseguido interpretar algo y no partiendo del sueño en si, sino de la impresión que me había causado
Podía ser algo simple, poco importante, sin embargo, sentía cierto desasosiego que no se correspondía con lo soñado.  No había motivo, razón, ni explicación lógica.
Empecé a tirar del hilo, conseguí descifrar una parte de su significado.  El resultado fue, que aumentó mi desazón  al conocerlo.

Esta simple y breve exposición, es para explicar, el sentido del poema que viene a continuación.  Está inspirado en un sueño real.
Al despertar sentí paz.  Enseguida comprendí,  qué me quería decir.

Lo cuento en el poema que dejo, a la libre interpretación.

viernes, 22 de enero de 2010

La caravana

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                                              La caravana

                                               Caravana blanca de caminar pausado,
                                               de esperanza incierta y pasos temblorosos,
                                               indiferente sigues el trayecto marcado,
                                               persigues la promesa de un mundo más dichoso.

                                              Atraviesas las ardientes arenas del desierto,
                                              tus caballos alados no conocen el mar,
                                              quieres libertad no un horizonte incierto,
                                              no depende de ti,  no lo puedes lograr.

                                             Mientras en el camino mantienes la esperanza,
                                             de llegar al lugar de las verdes praderas,
                                             y miras a la luna  ejecutar su danza
                                             piensas,  en el mundo nuevo ¿vendrá la primavera?

                                             Refleja en ti sus rayos el sol indiferente,
                                             en los rotos cristales del espejo de plata
                                             vuelve tu translúcida carga transparente.
                                             Imperturbable sigue la caravana blanca.


miércoles, 20 de enero de 2010

La mentira y el engaño

                            La mentira y.....                 

                                Rosa de mil colores sugestiva,
                                fragancia angelical embaucadora,
                                dulzor de mil abejas seductoras,
                                promesa en si misma ya cautiva.

                                Forjada de ilusión y fantasía.
                                Palabras dulces al compás de la lira
                                que acompaña al trovador. Es poesía
                                en torre de cristal. Es... la mentira.




                                              El engaño                  
                                   
                                    Mar agitado, naufragio, desaliento,
                                    al descubrir que no existe la vida,
                                    sacudida del alma, sin aliento
                                    ve navegar su mundo a la deriva.
                                    Quiere creer hace el intento,
                                    espera cicatrizar la herida
                                    Unido todo todo unido, lo siento.


La verdad, la mentira y el engaño

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Antes de nuestra existencia ¿ existía  la belleza, la bondad, la verdad  ? ¿Son, unos componentes más de la especie humana?  ¿Existen por si solos?
Es posible que si y nosotros, solo lo hayamos adoptado, apropiado o comprendido. Con nuestra capacidad de razonar, de abstraer, por medio de la inteligencia, lo hemos convertido en simples conceptos
Tienen una parte común, la convencional, y otra individual, la subjetiva que depende de la percepción de cada uno.
En realidad, todo está en nosotros. Fuera, solo existe como proyección.

Si me preguntan, qué es la verdad, contestaré que no lo se, puesto que dicho de esa forma, solo conozco la mía.
Mi verdad es aquello en lo que creo,  por tanto, solo me sirve a mi.
Por la misma razón, creo que cada uno tiene la suya y que va cambiando de acuerdo con las necesidades, intereses y conveniencias del momento. Es de consumo interno.
La verdad objetiva  no existe, porque no se puede aislar de cada individuo.  Es subjetivismo puro, que aumenta, si tenemos en cuenta, cómo siente cada uno su verdad, como la piensa y como la comunica.

Lo contrario de la verdad sería la mentira, considerado como tal, todo aquello que se dice o hace con la intención de engañar.
Pero  ¿no es mentira cada uno de nuestros actos?   En buena medida, si. Porque hacemos lo que no deseamos, o va en contra de nuestra manera de ser, de pensar, de sentir, en pro de ser aceptados.  La vida, es como si fuera una cadena de mentiras.
De alguna forma, pretendemos engañar siempre por ocultación, o por fingimiento,  enseñando la cara amable.
Para conseguir nuestros objetivos, tenemos que disfrazarnos y presentar una mejor imagen,  o bien, hacer afirmaciones o  expresarnos de forma, que conduzca al engaño. Lo hacemos todo más bonito, más aparente y menos real, más falso con la pretensión de mejorarlo.

Pero la mentira, no siempre cumple sus objetivos. Solo lo hace cuando conseguimos engañar.
No hay nada peor que sentirse engañado. Si, es decepcionante, porque significa, que alguien ha traicionado la confianza depositada en él.
Y es diferente ser engañado, a sentirse engañado. El naufragio.
Como pregunta final…¿Seríamos capaces de soportar siempre la verdad de los demás?
Al final, mentir, va a ser una virtud, más que un defecto.

Este breve resumen, es solo una especie de introducción, al poema que viene después.



domingo, 17 de enero de 2010

La rosa


                                                  La rosa                           

                                         ¿Por qué has de dar lo que los otros quieran?
                                         ¿Por qué en lugar de recibir has de dar?
                                          Porque si tu te entregas y no esperas
                                          porque lo tuyo es darte y no esperar,
                                          no llores si te ignoran cuando quieras
                                          recibir y nadie quiera dar.


sábado, 16 de enero de 2010

Bajo la larga sombra



             Bajo la larga sombra


            Bajo la larga sombra del olvido,
            sin haberlo esperado me encontré,
            sentí nostalgia de momentos vividos,
            de lo que pudo ser y nunca fue.

           Atrás quedaron las promesas perdidas,
           partículas disueltas en el tiempo,
           mi alma, profundamente herida,
           al ser querida y olvidada al momento.

           Miré la sombra que iba lentamente,
           en el azul infinito enmarcada,
           se perdió a lo lejos de repente,
           en el mágico azul, de la mañana.

           Comprendí que lo real son los sueños,
           y del sueño no quise despertar,
           sentada en la tierr, tocando el suelo
           los ojos cerrados,  siempre recordar.

           En un momento de lucidez temprana
           me levanté del suelo, de la tierra,
           sentí en el rostro el frescor de la mañana.

           Emprendí la ruta que el recuerdo siguiera
           para llegar a un punto indefinido
           del horizonte, un punto cualquiera,
           donde tornar en azul el olvido.


viernes, 15 de enero de 2010

El canto del gallo


Hemos deshumanizado las ciudades y nosotros, con ellas. Son algo frío donde la gente, va con prisa a todas partes, donde nadie se mira a la cara. Es un poco antinatural puesto que nuestro ser íntimo, nos pide estar en contacto con la naturaleza. Somos parte de ella.
Nuestra vida, se ha convertido en algo gris y rutinario como el asfalto que pisamos, porque todo está previsto. Lo imprevisible, lo es por accidental.
Desde arriba, nos confundimos todos y formamos parte de ese paisaje urbano masificado y gris.
Nuestro mundo, queda reducido a lo cotidiano. Es como si lleváramos a cabo un reduccionismo colectivo en el que solo cupieran las personas más próximas, entendiendo por proximidad, no el espacio, sino los afectos. Aún así, cada vez damos menos y necesitamos más.

Recuerdo algo que me ocurrió hace un tiempo y que indica, hasta qué punto a veces, parece que estemos fuera de lugar.
Iba en coche, cuando al tener que parar ante un semáforo y esperar que se pusiera verde, en medio de la ciudad, oí cantar un gallo. Por un momento, por unos segundos, me vi transportada a otro lugar diferente.
El color gris se transformó en verde, los edificios en árboles y el olor de la contaminación, cambió por olor a tierra mojada. Solo fueron segundos, inmediatamente volví , miré a mi alrededor, y vi que solo había edificios de cierta altura y coches por todas partes. Estaba asombrada y sin saber de donde podía proceder en ese lugar, algo tan opuesto y diferente a lo que me rodeaba. Miré con más detenimiento y observé que muy cerca, había una casa vieja de planta baja. Comprendí, que de allí podía proceder el canto del gallo.
Todo un mundo, el del campo, representado en un animal tan insignificante como es un gallo, metido dentro de otro, el de la ciudad. Tan opuestos entre si y tan próximos, lo natural en contraposición a lo artificial, l adelanto en cuanto a comodidades frente al retraso en referencia a las relaciones humanas. La proximidad y el distanciamiento. En fin, todos me parecieron polos opuestos.

No quiero decir con ésto, que la proximidad sea para bien siempre, ya que también propicia los enfrentamientos, las rencillas y las envidias. Buscamos la compañía, la relación, pero al mismo tiempo, defendemos nuestro espacio y combatimos a quien tenemos próximo.
Además, cada uno de nosotros allí dónde estamos, con nuestra manera de proceder y de vivir, fabricamos nuestro propio mundo, en el que nos encerramos mentalmente, incluso físicamente Somos así de contradictorios.
Cierto es que las ciudades tal como están actualmente concebidas, son antinaturales, hemos ganado comodidades pero también nos hemos deshumanizado, no hay cabida para todos y quizá propiciemos la soledad en compañía. Nos falta tiempo, y nos sobra espacio.
Esta es la reflexión que me produjo la sorpresa de oír algo tan sencillo y corriente en otro tiempo, como es, el canto de un gallo. .  
        

martes, 12 de enero de 2010

Todo está en la mente



No me gusta seguir esquemas, ni órdenes, ni métodos, porque resulta un poco monótono.  Me agrada mas, improvisar a pesar de todos los riesgos que supone, incluso que la mente quede en blanco.
 Empezar con un tema, es seguir una línea marcada, aunque como todo, tiene ventajas e inconvenientes.
Ahora estoy en un punto, que no se qué voy a decir, ni la dirección que voy a seguir. Porque...¿cómo voy a improvisar sobre la improvisación?.
Sin querer, he caído en aquello de lo que quería escapar para tratar de algo en concreto como es la improvisación, la inventiva.

¿Tiene que ver improvisar con vaguear? ¿Se puede precisar al mismo tiempo? ¿Se puede ser eficaz, ocurrente, preciso, sin método?
 En todo caso esa manera de proceder, mas tiene que ver con la creatividad que con la organización. Ante cualquier imprevisto que surja, dar una respuesta adecuada, que se salga de lo planificado y que siguiendo una línea rígida, quizá sería imposible.
Pero, pensándolo bien,  no hay nada que hagamos o pensemos, que no parta de lo conocido, de lo aprendido, por tanto, los recursos también lo son.
Cuando se repiten el número de situaciones similares, ya nos hemos habituado a responder de una determinada manera, por medio de la repetición de actos.
No hay nada que sea absolutamente original. Si lo es,el  cómo lo encadenemos a lo anterior y a lo siguiente. El eslabón de la cadena.

Queda conocer, la actitud de cada uno ante lo imprevisto, lo sorprendente, lo accidental, o lo imprevisible.
Hay quienes optarían por la retirada, porque sienten miedo ante lo nuevo, ante lo desconocido. Se sienten desconcertados y la respuesta sería, la escapada.
¿Cómo se sentirán después? A veces, con sensación de descanso, pero otras, les producirá una serie de conflictos personales o bien dudas, arrepentimientos, inculpaciones bien a si mismos, o bien a los demás.
Pero el que huye, es porque tiene temor, por tanto también lo tendrá a la hora de  hacer una introspección, y de pretender verse lo más aproximado a cómo es, y  responsabilizarse de sus éxitos o fracasos. Es posible, que nunca se considere responsable de nada, y su vida sea una continúa huida.
Por el contrario, otros en su lugar, se crecerían y supondría para ellos lo nuevo o lo desconocido, un estímulo.
Además de tener cierta fortaleza, no les agrada seguir lo lineal.

Continuando con el principio, improvisar, puede ser en el pensamiento o en la acción, en lo teórico, o en lo práctico, aunque pensamiento y acción vayan unidos.
 y  por último, (que no es lo mismo que acabar), esta frase de Aristóteles:

"No hay nada en al mente, que no haya pasado antes por los sentidos"

Improvisar, no es inventar.Todo está en la mente y depende del momento, al cabo de un tiempo, todo pierde actualidad y quizá empezaríamos de nuevo.
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domingo, 10 de enero de 2010

Furtivo


Furtivo

Alumbrado por la luz de las estrellas,
entraste furtivo al jardín una noche,
aspiraste el perfume, te llevó hasta ella,
te entregó su aroma; sin reproche.

Acababa de nacer, de abrirse a la vida,
en un despliegue de pétalos de rosa.
¿Era culpable de ser tan atractiva
y de ser a la vez tan candorosa?

Consciente de su gran fragilidad,
escogió adornarse de rojo color,
en vanidoso alarde de ingenuidad;
rojo como la sangre, el fuego, el amor.

Noche de luna llena, luna de plata.
Furtivo llegó el que la amaba.
La quiso suya, la cortó de la mata,
no quiso escuchar, cuando suplicaba.


jueves, 7 de enero de 2010

¿Qué pasará?



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¿Qué pasará cuando el poeta calle?
Cuándo sus bellos cantos se dejen de escuchar,
cuándo cierre los ojos para no ver la vida,
cuándo los riachuelos se sequen al pasar.


Cuándo los nubarrones oculten la luna,
y las fuentes no vuelvan a manar.
Cuándo los sonidos sean simples gemidos
su corazón deje de palpitar.


El arco iris no tenga colores,
los  pájaros ya no sepan volar.
¡Poeta, en tus ojos se han secado las lágrimas
y en tu boca las palabras ya no pueden brotar!


Te has sentado en un banco del parque,
tu alma al descubierto en el aire  perdida.
¿Quién la cobijará?




martes, 5 de enero de 2010

Volar con alas propias



Volar con alas propias


Quise soñar, volar, alejarme del suelo.
¡Ay ilusa de mi, sin tener alas!
Tomé prestadas,  las tuyas de altos vuelos,
adornándome, con la túnica de gala.

En ascenso sin fin, subí tan alto,
que  di de lleno, en las nubes del sentir,
y abajo quedó, tirado en el asfalto,
una parte de mi ser,  de mi vivir.

Pensé...¡Qué delicia el haberte conocido!
Pero ese día fue ayer, tiempo pasado.
En el pasado, todo queda perdido,
y lo perdido, todo queda olvidado.

No se, si quién te trajo fue la suerte.
Viniste, en el jugar de la vida,
pero...el tiempo que me costó quererte,
es tiempo de descuento, despedida.
En recorrido final, todo se olvida.


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http://www.youtube.com/watch?v=bBSOb1mNQYs&feature=related


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