La luz de la ilusión
Se va la oscuridad con ella el llanto,
vienes ilusión traes la luz del día,
siente mi corazón el sobresalto.
desaparece el pesar que me afligía.
Contemplé tu porte envidié tu semblante,
eras transparente como agua cristalina,
quise ver el reflejo beber de tu fuente,
sentir un simple roce de la mano divina.
Me vestí de blanco como las azucenas,
solo pensé en amar al seguir el camino,
saborear la miel dejar atrás las penas,
acompasar el paso unirlo a tu destino.
¡Era tanta la belleza deslumbrante!
¡Era tánto el fulgor que desprendías,
que cegaste mis ojos un instante,
y te perdiste en infinita lejanía!
Fuiste en un tiempo la razón de mi vida.
¡Cruel ilusión, que un día me engañaste,
para dejarme en el dolor sumida!
Volverás quizá como las estaciones,
vendrás como la lluvia, el frío, el viento,
y dirás, no penes, sentirás emociones
que fueron borradas por el tiempo.
¿No sabes que el cielo está en la tierra?
¿No sientes que en la tierra está el cielo?
Levanta la cabeza eleva tu mirada,
en el azul eterno encontrarás consuelo.
Hola Mª Jesús,
ResponderEliminarQue bonito, sólo decirte que "La poesía es la esencia del sentimiento ", así, lo describes en este poema.
Un abrazo.
La Ilusion es la fuerza suprema
ResponderEliminarque nos queda,
cuando todo lo demas
se hace añicos.
caminante
Hola, María Jesús.
ResponderEliminarPrecioso poema, precioso de verdad. De una intensidad grande, que me obliga a parar antes de seguir leyendo. Ya te lo dije en otro lugar.
Creo que las palabras tienen esa claridad que viene de la pensada maduración, unida al sentimiento profundo y auténtico. Lo que tienen, para mí, los buenos poetas.
He disfrutado leyéndolo; tiene, para mí, cuatro partes; una introducción muy bonita y sentida, una referencia al pasado, más extensa; ambas más marcadas por sentimientos; luego una tercera parte, que anuncia la posible vuelta futura, y la última estrofa, que se dirige a la otra persona, y que creo que es más de pensamiento.
Transmite unas ideas muy bonitas.
En fin, Mª Jesús, perdón por el rollo, y enhorabuena otra vez.