Esta frase tan sencilla, y en apariencia, carente de un verdadero significado, figuraba en un libro de filosofía china.
No habla de motivos, ni de justificaciones, solo habla, del sentir de cada cual.
Porque se puede ser desafortunado sin motivos para ello y lo contrario, tener motivos o razones, y no sentirse. Depende del enfoque que le demos a la vida, de nuestras aspiraciones y las expectativas puestas.
En algún momento, en mayor o menor medida, cualquier persona puede sentirse infortunada. Lo malo es el recrearse en la suerte y caer en la inmovilidad.
Una de las causas, puede ser la envidia de lo que se considera bienestar ajeno, o el no poseer aquello que otros tienen y que pensamos carecemos, considerándolo un bien.
Es posible incluso, que no tenga el valor que le estemos dando, al mismo tiempo que no apreciamos lo que tenemos que puede ser incluso mejor. Pero ciertos sentimientos de inferioridad, nos hacen sobrevalorar lo ajeno e infravalorar lo propio. A veces incluso la misma ambición.
La envidia, causa y motivo de tantos enfrentamientos, disputas, enemistades y odios.
Las situaciones de descontento, nos puede conducir a la autocompasión, al lamentarnos de nuestras propias desdichas y por tanto a la autojustificación de nuestra incapacidad para luchar y tomar determinadas e iniciativas .
La persona luchadora, decidida, audaz, siempre tendrá unas metas que intentará alcanzar y no caerá en el lamento como forma de justificación.
La autocompasión conduce a la destrucción de la propia persona que llega a sentirse impotente e incapaz, por tanto, desgraciada.
Los orientales, en este caso los chinos, son prácticos por naturaleza. Con esta frase tan simple, expresan la diferencia entre "el ser y el sentir".
Es difícil saber si alguien se siente desgraciado, aunque nos pongamos en su propia piel y nos identifiquemos por medio de la empatía.
Actualmente, cuando vemos por la calle a familias con niños, revolviendo en los contenedores, ya no es tan complicado el sentir lo mismo que los demás.
Ahora es cuando comprendo el verdadero significado de la frase y no cuando la leí.
Si, el que se siente desgraciado, lo es. Recuerdo a tanta gente que poseían tanto y les sirvió para tan poco...
Quizá tener en exceso, sea peor que no tener nada, al menos de esta manera, siempre queda la esperanza.
Me pregunto ¿Es lo mismo sentirse desgraciado que el no sentirse feliz? La respuesta, otro día.
http://www.youtube.com/watch?v=sJ3dQl3mm1U&feature=channel
.
La mayoria de los que se sienten desgraciados, casi nunca ha conocido la desgracia; pero menosprecian las bondades que les rodean.
ResponderEliminarEl sentirse desgraciados es un castigo a la soberbia de creerse merecedores de lo que no se merecen.
caminante
Buenas noches Maria Jesus!
ResponderEliminarNo hay nada mas ingrato en la vida, que olvidar a quien te recuerda!
Gracias!
Yo quiero desearte de todo corazon, no unas felices navidades, quiero desearte mas bien, que sigas encontrando sentido a ser como eres y esto hara que incluso en los momentos tristes, encuentres la felicidad.
"Nunca es largo el camino que conduce a la casa de un amigo."
Juvenal
un abrazo
caminante
buenas noches
ResponderEliminarcon un grupo creo que olvidado injustamanete, pero con musica sensible y palabras certeras:
vainica doble
http://www.youtube.com/watch?v=mySzaJEBFaE&feature=related
caminante
Buenas noches Maria Jesus
ResponderEliminarYo que soy agnostico, te deseo una Navidad en el mas profundo sentido cristiano.
Porque se que tu lo sientes asi y respetas el sentir de los demas, tu Navidad no es una noche, tu Navidad dura 365 dias.
Que Dios te bendiga a ti y a toda tu familia.
caminante
Un saludo Caminante. Feliz Navidad, agnóstico o creyente, todos buscamos calor, porque no, en estas fechas.
ResponderEliminarUn Saludo.