Por mucha protección que se desee poner, siempre nos queda una o varias partes al descubierto, ¿es eso malo? No, no lo es. Cuando te rompes, cuando te das cuenta de tu error , en el sentido que sea, es necesario recuperar nuestra forma, nuestra alma, nuestra sombra que, muchas veces parece que camina sola.
Creo que te he enviado un comentario, pero ha desaparecido.
Te decía que no es malo, mostrar el alma,, creo que puede ser una manera de ir por la vida como otra cualquiera, a veces , cuando cometemos errores de la índole que sea, es una necesidad regresar a los principios y volver a recomponer nuestra figura , nuestra alma y nuestra sombra ya que al parecer esta última cuando le parece viaja sola por su cuenta.
Bueno es lo que pienso, pero como mi mitad es bastante alocada y me mueven los sentimientos- buenos y malos- tampoco es cátedra lo que digo, siempre con matices.
el contador de comentarios va mal. Creo que es por complicidad, pero en vez de sumar, resta.
A veces, por querer despojarnos y sacudirnos lo accesorio, que supone un lastre, nos quitamos lo fundamental. Siempre la ley del péndulo, siempre de un lugar a otro, de un extremo a otro.
Otras veces, vamos encorsetados y otras, parapetados. Cada uno, adopta una actitud, otros no adoptan ninguna, que también es un procedimiento más.
Los corsés y las ataduras que no me gustan, son las doctrinales. Prefiero quitármelas de encima y exponerme a las miradas por ir en contra de la corriente o por nada. La nada a veces es algo, y está bien. Hoy hace un día lluvioso, pero si cierro las ventanas y enciendo la luz artificial, no me enteraré de lo que ocurre fuera. Solo será un día más igual que otros muchos. La lluvia,como símbolo de no sé qué. Y el aislamiento, como actitud .
Hola Mª Jesús , buenos días:
ResponderEliminarPor mucha protección que se desee poner, siempre nos queda una o varias partes al descubierto, ¿es eso malo? No, no lo es. Cuando te rompes, cuando te das cuenta de tu error , en el sentido que sea, es necesario recuperar nuestra forma, nuestra alma, nuestra sombra que, muchas veces parece que camina sola.
Un abrazo.
Begoña.
Hola Mª Jesús, buenos días:
ResponderEliminarCreo que te he enviado un comentario, pero ha desaparecido.
Te decía que no es malo, mostrar el alma,, creo que puede ser una manera de ir por la vida como otra cualquiera, a veces , cuando cometemos errores de la índole que sea, es una necesidad regresar a los principios y volver a recomponer nuestra figura , nuestra alma y nuestra sombra ya que al parecer esta última cuando le parece viaja sola por su cuenta.
Bueno es lo que pienso, pero como mi mitad es bastante alocada y me mueven los sentimientos- buenos y malos- tampoco es cátedra lo que digo, siempre con matices.
Un abrazo.
Begoña.
ESto va como un CENCERRO.
ResponderEliminar:-))
Buenos días Begoña
ResponderEliminarel contador de comentarios va mal. Creo que es por complicidad, pero en vez de sumar, resta.
A veces, por querer despojarnos y sacudirnos lo accesorio, que supone un lastre, nos quitamos lo fundamental.
Siempre la ley del péndulo, siempre de un lugar a otro, de un extremo a otro.
Otras veces, vamos encorsetados y otras, parapetados.
Cada uno, adopta una actitud, otros no adoptan ninguna, que también es un procedimiento más.
Los corsés y las ataduras que no me gustan, son las doctrinales. Prefiero quitármelas de encima y exponerme a las miradas por ir en contra de la corriente o por nada.
La nada a veces es algo, y está bien.
Hoy hace un día lluvioso, pero si cierro las ventanas y enciendo la luz artificial, no me enteraré de lo que ocurre fuera. Solo será un día más igual que otros muchos.
La lluvia,como símbolo de no sé qué. Y el aislamiento, como actitud .
En fin, el día.
Un abrazo
María Jesús